Prohibido olvidar al pueblo saharaui
El pasado 24 de octubre, los socialfascistas del PSOE y la coalición Sumar firmaron un acuerdo de gobierno en el que se omitió de manera deliberada la cuestión del Sáhara Occidental. Una decisión que supone una nueva traición de Sumar al movimiento obrero y a la lucha por la libertad del Sáhara Occidental, pues es evidente que a través su candidata Tesh Sidi instrumentalizaron la valiente lucha del pueblo saharaui para su beneficio electoral.
Son muchas las concesiones que la “izquierda” del sistema ha realizado al régimen genocida de Marruecos desde aquel 14 de marzo de 2022, cuando Pedro Sánchez envió una carta al dictador Mohamed VI donde, en un ejercicio de genuflexión enorme, asumía la propuesta marroquí de autonomía como la «más seria, creíble y realista». Un movimiento que supuso la muerte de la posición histórica del PSOE sobre el Sáhara Occidental y que vino precedido del cese de la Ministra de Exteriores, Arancha González Laya, a petición de Rabat como condición para normalizar las relaciones con el Estado español, ya que la ahora exministra había aprobado la hospitalización de Brahim Ghali en Logroño. Huelga decir que su sustituto, José Manuel Albares, es poco más que un lacayo del régimen marroquí.
Un mes más tarde, el 19 de abril de 2022, conocíamos que entre 2017 y 2020 se había utilizado la herramienta de espionaje Pegasus contra 63 políticos independentistas. Pero la cosa no quedó ahí. A los pocos días salió a la luz que actuales cargos del gobierno español como Pedro Sánchez y Fernando Grande-Marlaska tenían sus teléfonos infectados con el software espía que, casualmente, es utilizado por Marruecos. El Estado español demostraba así su posición como eslabón débil dentro de la cadena imperialista al ser espiado de forma externa. Posteriormente, en la madrugada del 24 al 25 de junio, en la valla que separa Melilla de Marruecos, la policía marroquí asesinó con total impunidad a 37 personas que pretendían entrar en dicha ciudad autónoma, a lo que habría que sumar más de un centenar de heridos. Pedro Sánchez salió rápidamente a justificar la brutalidad policial. Por consiguiente, todos los calificativos que se puedan emplear contra el gobierno español serán escasos, pues estamos hablando de auténticos criminales de guerra que tienen las manos manchadas con la sangre de los proletarios saharauis, por no mencionar su apoyo a los regímenes fascistas de Israel y Ucrania.
Contrario a esto, la clase trabajadora del Estado español ha demostrado en numerosas ocasiones su apoyo al pueblo saharaui y su animadversión hacia el régimen de ocupación marroquí. Un rechazo que debe desplegarse también contra Pedro Sánchez, Yolanda Díaz y el resto de las marionetas de la política imperialista de Marruecos que utilizan el electoralismo y el parlamentarismo burgués para sojuzgar la lucha obrera.
La clase obrera es internacional. Los obreros españoles defenderemos siempre a nuestros hermanos de clase del Sáhara Occidental y lucharemos contra las fuerzas de ocupación marroquíes que tratan de desplegar su influencia en la política del Estado español. Nunca olvidaremos que desde 1975 han tratado de imponer a sangre y fuego su sistema político en los territorios que legítimamente pertenecen al pueblo saharaui y que han buscado por todos los medios posibles borrar del mapa la existencia de la República Árabe Saharaui Democrática.
Marruecos es una potencia imperialista y criminal que lleva cinco décadas tratando de someter al valiente pueblo saharaui. Para ello, el ejército marroquí ha llevado a cabo bombardeos contra civiles que huían a zonas seguras, han ocupado territorios que no les pertenecían, han atacado a civiles con napalm, fósforo blanco, bombas incendiarias y han llevado a cabo toda clase de saqueos, torturas, encarcelamientos, violaciones y desapariciones con total impunidad a cambio de garantizar el expolio de los recursos naturales de la zona como fiel peón de Estados Unidos y la Unión Europea.
Desde el PCOE estaremos siempre del lado del pueblo saharaui, de la legítima lucha armada por la liberación y soberanía completa del Sáhara Occidental. Frente a esta barbarie, enarbolaremos con orgullo la bandera roja que representa el internacionalismo proletario y el socialismo como única salida para acabar con toda opresión. El capitalismo, en su fase actual de imperialismo y de crisis general del sistema, ya no puede escudarse más tras la palabra “democracia”, pues es evidente y claro a quiénes favorece esta democracia capitalista; a los más ricos, a los burgueses, a las grandes corporaciones y monopolios, y que perjudica de forma sangrante al proletariado.
Queda claro que la lucha por la emancipación nacional de las naciones oprimidas o los territorios pendientes de descolonizar es inviable si esta no se subordina a la lucha revolucionaria por la emancipación del proletariado, a la lucha por el socialismo a nivel internacional. Los trabajadores del mundo necesitamos vivir en un mundo en paz y eso pasa por la abolición del capitalismo, por la salida y desmantelación de la OTAN y la Unión Europea, así como de los demás organismos imperialistas como el FMI, la OMC o el Banco Mundial. En definitiva, pasa por instaurar el Socialismo de manera revolucionaria.
¡POR EL INTERNACIONALISMO PROLETARIO!
¡POR LA LIBERTAD DEL SÁHARA OCCIDENTAL!
Madrid, 29 de octubre de 2023
SECRETARÍA DE RELACIONES INTERNACIONALES DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E.)