Breve Historia del PCOE en Córdoba. El Leninismo viene para quedarse
Nunca fue fácil mantener los principios en esta provincia para ninguna ideología revolucionaria sin mimetizarse con el entorno hostil de las demás fuerzas venidas a menos y su redil, que constituyen (como se autodefinen ellas o como lo hacen los juristas, periodistas o historiadores de su cuerda), un pilar muy importante del régimen y la sociedad existente, ya dada desde antes por el Movimiento Bakuninista contra los marxistas, también llamados por ellos “comunistas autoritarios” en el III Congreso de la Federación Regional Española (F. R. E.) celebrado en Córdoba el 25 de diciembre de 1872 al 3 de enero de 1873. Sus posturas beneficiarán a la burguesía y a la reacción demostrando su carácter pequeño-burgués, insufladas a los obreros con una escasa formación política de la ciencia revolucionaria y que dieron al traste no sólo con la F. R. E. sino con toda la A. I. T. en España incluida la Federación Madrileña tras las luchas cantonalistas, algo que Friedrich Engels analiza en su ensayo “Bakuninistas en Acción”. En la misma nos enseña cómo no se debe actuar si queremos llevar a cabo una revolución.
¿Por qué se habla de ideología y no de organización? Para dejar clara esta definición conviene explicar que en 1995 en nuestra provincia decidieron enterrar el leninismo llamándolo falsamente “La última utopía”, título de la obra del historiador Moreno Gómez. En esta obra se habla de cordobeses ejemplares de firme convicción marxista-leninista de los años veinte hasta la guerra de clases de finales de los treinta del siglo pasado, incluso en la clandestinidad contra el franquismo y los maquis, nada que ver con la utopía planteada por el ex – Secretario General del PCE Julio Anguita, el cual tanto ayer como hoy se retrata en sus palabras como un progre contrario a la ciencia leninista y a las fuerzas del proletariado, favoreciendo proyectos social-chovinistas e interclasistas.
Es por ello que dieciséis años después, en el 2011, nace en la campiña sur el proyecto de crear un verdadero Partido de Cuadros basado en la ciencia marxista-leninista, que desechaba el estancamiento en fenómenos nacionalistas o folclóricos en que otras organizaciones cayeron y que a día de hoy no forman parte ya de la Historia del Movimiento Obrero, siendo su repercusión mínima así como su proximidad a las masas, abocados al sectarismo de las mesas de café o de las reuniones de amigos, dejando sólo fenómenos que únicamente responden al interés del electoralismo local, quemando así aún más a las mismas, las cuales lo reflejan en su hartazgo por manipulaciones y traiciones.
Nuestro leninismo nace en tierra yerma, reducida a terrones y sequedad por un trabajo previo de hostigamiento a las masas, sobre nuestro carácter revolucionario y nuestra concepción de lucha de clases en una constante ya dada desde antes en esta provincia en la entrada del Marxismo y no hoy por ello es mucho menos su reacción a la del Leninismo, el cual daban por liquidado después de la generación de la guerra de clases y la clandestinidad en el franquismo.
Es por ello que desde ciertos sectores caducos resulta preferible la eliminación de la posible influencia del PCOE en los frentes de masas, de obreros, estudiantiles, de parados, etc; demostrando así su cariz reaccionario que no sólo los aleja de una mínima ciencia leninista, sino que los acerca a los postulados de la burguesía capitalista culpable de nuestra situación actual. No nos resulta extraño que cuando se sitúa y echa raíces una organización que de verdad defiende los intereses de nuestra clase, las demás organizaciones pseudo-marxistas, socialdemócratas, bakuninistas, social-liberales, etc; la ataquen desde sus direcciones, las cuales son, como bien se definen y hemos aludido en el primer párrafo, una parte más del régimen actual, sin temblarle la mano a recurrir a tribunales burgueses para resolver sus cuitas políticas e ideológicas a lo más básico que es arrancar carteles o utilizar fotos de manifestaciones para señalar con el dedo a militantes y simpatizantes como en el 2013 hicieron en la marcha del 1 de mayo hacia nuestro cortejo utilizando la maquinaria institucional local de represión para el acoso político contra simpatizantes o militantes menos curtidos. Esto nos lleva a nuestra máxima leninista, ya que nuestra fortaleza está en nuestra depuración como dijera Lenin en Londres en la definición del partido de nuevo tipo, del partido de vanguardia que desde el PCOE proponemos como única alternativa.
Sin embargo, una cosa está clara y es nuestro papel ante las masas, ya que a día de hoy éstas están cada vez más huérfanas de un referente que les expliquen y les hagan saber a sus preguntas dudas y las guíen por el camino correcto, las cuales cada día se harán más cercanas a nuestras posturas y más pronto que tarde irán junto a la bandera del trabajo junto a la bandera roja, como el color de la sangre que nos iguala a tod@s a nuestro lado desde los centros de trabajo, obras, etc; junto a las Asambleas de Comités de Delegados y Trabajadores (ACDT) o desde los barrios con Asociaciones de Vecinos, Asambleas Populares o desde los institutos y universidades con las Asambleas de estudiantes, profesores, etc; para conseguir entre todos esa emancipación de la clase obrera en nuestra provincia, Andalucía y el Estado español. Donde la ciencia de la vanguardia del Marxismo-Leninismo triunfe, porque como dijera el camarada Lenin: “es todopoderosa, porque es cierta“.
Víctor Núñez, Secretario Político Provincial del PCOE en Córdoba