Es necesaria otra Huelga General
Han pasado casi tres semanas de la exitosa Huelga General del 29 de septiembre y observamos el silencio traidor de las cúpulas de las centrales sindicales mayoritarias. El incremento del paro por millones y una política económica de derechas no sirvieron para que las direcciones de CCOO y UGT creyeran necesario convocar una Huelga General mucho antes del verano. Sin embargo, la clase trabajadora no falló y, aún sabiendo que llegaba tarde, apoyó masivamente una movilización contra la política antiobrera del gobierno de Zapatero, apoyado por la inmensa mayoría del Parlamento burgués.
Tres semanas después de la Huelga General, contemplamos que las condiciones que la desencadenaron no sólo siguen vigentes sino que han aumentado, existiendo aún más motivos para continuar y agudizar la lucha con la que plantear una nueva convocatoria de Huelga General.
Los organismos capitalistas internacionales ya han expresado que el Gobierno español debe hacer más reformas que vayan en contra del Pueblo trabajador y a favor de la burguesía. Hablan de incrementar los impuestos, del pensionazo, de unos Presupuestos Generales del Estado que recorten el ya recortado gasto social, de nuevas privatizaciones, etc… Como ya hemos visto, y así lo han reconocido los mismos representantes políticos del capital en el Parlamento, la política económica viene dictada desde el exterior demostrándose la inexistencia de soberanía nacional, pues jamás existió siquiera una soberanía popular en los últimos 70 años. Ello se refleja en una Patronal crecida, siendo sabedora de que el Gobierno va a mantener la última Reforma Laboral aprobada, y cuyo presidente, el mismo que no paga a sus trabajadores y lleva a sus empresas a la quiebra, no oculta que “para salir de la crisis hay que trabajar mas y cobrar menos”.
Ante este escenario, consideramos que hay motivos de sobra justificados para la convocatoria de otra Huelga General antes de navidad. La voz de los trabajadores, de la mayoría del pueblo, debe ser respetada, y esa voz fue contundente el pasado 29-S. Esperamos que las direcciones sindicales mayoritarias tomen buena nota de la lucha de la clase trabajadora en Francia y en Grecia. De lo contrario, estaremos ante una nueva traición de las cúpulas de CCOO y UGT, las cuales deberán ser barridas inmediatamente por los trabajadores y sus legítimos representantes, los comités de empresa, a los cuales llamamos a unirse constituyendo Asambleas de Comités y Delegados.
PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E.)