Melilla retrata al gobierno “progresista” y a “las democracias occidentales”

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En la madrugada del día 24 al 25 de junio, en la valla que separa Melilla de Marruecos, la policía marroquí asesinó, según cifras oficiales, a 29 personas que pretendían entrar en dicha ciudad autónoma, aunque las cifras que aportan organizaciones de derechos humanos señalan que la cifra de asesinados sobrepasa los 40, así como más de un centenar de heridos. Imágenes donde se constata el hacinamiento de personas subsaharianas, esposadas por la policía del criminal Estado marroquí, sufriendo un trato inhumano y degradante.

Esta acción, tal y como reconoció el presidente del gobierno español Pedro Sánchez, es fruto de la cooperación entre ambos Estados, señalando literalmente “Reconocer el trabajo que ha hecho el Gobierno marroquí, en coordinación con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de España, para tratar de frenar un asalto violento y que pone en cuestión nuestra propia integridad territorial (…) Insisto, ha sido un asalto violento, bien organizado, bien perpetrado, y en este caso, creo que bien resuelto por parte de los dos cuerpos de seguridad tanto en España como en Marruecos”. Por consiguiente, los calificativos que hay que atribuirle al gobierno marroquí, en justicia, también hay que atribuírselos al gobierno español, los cuales tienen las manos manchadas de sangre.

Al igual que en la década de los 50s del siglo pasado EEUU no dudó en apoyar los regímenes fascistas en Europa de Portugal – que de hecho fue fundadora de la OTAN – y en España del asesino Franco, padre ideológico y espiritual del actual Estado español, hoy la OTAN apuesta por fortalecer a la corrupta y criminal monarquía marroquí. El fascista Trump reconoció la soberanía marroquí sobre el Sahara en diciembre de 2020, tras la firma de los Acuerdos de Abraham por el Estado asesino de Israel, Bahréin, Emiratos Árabes y Sudan al objeto de combatir a Irán, hecho que propició también el acuerdo para la normalización de relaciones entre Marruecos e Israel, ambos movimientos dirigidos por la potencia más criminal que ha parido la historia, EEUU, al objeto de reconfigurar tanto Oriente Medio como África al objeto de agudizar y potenciar el saqueo norteamericano de ambas zonas del planeta.

Los intereses de Marruecos y de la bestia sionista se entrelazan perfectamente, puesto que ambos regímenes ansían ejercer un dominio sobre un territorio que no les pertenece, el Sáhara Occidental y Palestina, respectivamente. Y para EEUU apoyar a los criminales Estados de Israel y Marruecos en la opresión contra Palestina y el Sáhara Occidental es la fórmula para que sus monopolios puedan saquear los recursos naturales en Oriente Medio y en la zona del Sáhara, aparte de ganar espacio geoestratégico a la hora de tratar de controlar el norte de África, la zona del Mediterráneo y Oriente Medio.

Es en esta lógica donde se tiene que incardinar que el títere gobierno español de PSOE y PODEMOS/IU/PCE haya cambiado la política mantenida con respecto del Sáhara Occidental, asumiendo formalmente que esta zona sea una autonomía marroquí rompiendo con la posición mantenida por el Estado español durante más de 4 décadas, que es la posición de la ONU, de defensa del derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui y la celebración de un referéndum.

Sin duda, Pedro Sánchez está demostrando ser una auténtica marioneta de los EEUU, y ello se constata con el seguidismo a la criminal política norteamericana con respecto de Marruecos o siendo el presidente más entusiasta en la defensa del Estado fascista ucraniano y en la beligerancia contra Rusia. Un presidente del Gobierno que no ha dudado en engañar a su electorado diciendo que iba a derogar las políticas fascistas y nocivas del PP del corrupto Rajoy pero resulta que está gobernando con ellas, con el apoyo infame e incondicional de la mal llamada “izquierda”, que va desde PODEMOS-IU/PCE hasta BILDU pasando por ERC.

Para Pedro Sánchez, asesinar a 40 subsaharianos es un trabajo “bien resuelto” y que miles de subsaharianos huyan de las guerras y el hambre, estos hermanos de clase agredidos en la valla melillense parecen ser que provenían de Sudán del Sur, originados por los propios imperialistas provocándoles el desarraigo de sus países, los convierte en violentos asaltantes “que ponen en cuestión nuestra propia integridad territorial”, asumiendo Pedro Sánchez el mismo discurso del fascista Abascal de VOX. Y es que este fascista de VOX tiene toda la razón cuando afirma que VOX no sólo está poniendo encima los debates que interesan a la reacción – de hecho lo que en realidad ha hecho es escorar totalmente al sistema político hacia la extrema derecha, y eso que ya estaba escoradísimo hacia el costado derecho – aparte de colocar al PP, que es exactamente igual de fascista que VOX, como un partido “moderado”. Escuchando a Sánchez o a Margarita Robles no nos cabe duda que VOX, PP y PSOE en esencia abrazan la misma ideología fascista y son el mismo partido.

Melilla retrata al Gobierno “de progreso” aunque no haya cambiado ni derogado absolutamente ninguna política represiva del corrupto Gobierno de Rajoy y hace que este gobierno tenga las manos manchadas de sangre. Hay que recordar las palabras de Sánchez y demás políticos del capital cuando estalló la guerra en Ucrania con respecto a los huidos por dicha guerra y contraponerlo con las palabras emitidas por ese mismo sujeto aplaudiendo que se asesinen y apaleen a seres humanos que huyen de las guerras que los imperialistas crean en África para saquear los recursos naturales de esos países.

Pero también retrata a la Unión Europea y sus políticas, que no duda en firmar acuerdos con satrapías como la marroquí al objeto de “vigilar las fronteras europeas” entregando dineros que roban a los obreros a auténticos asesinos que les hagan de matones, de sicarios y que han convertido el Mediterráneo en un inmenso cementerio.

Las “democracias occidentales” quedan retratadas como lo que son, auténticos Estados fascistas cuya política exterior es la guerra imperialista y el saqueo, no dudando en acribillar y asesinar a seres humanos que huyen de esas guerras y que son víctimas de la política exterior criminal que practican. Las “democracias occidentales” demuestran con esta forma de actuar o con los campos de exterminio de refugiados en Turquía y en Grecia que desprecian al ser humano, al que reprimen y asesinan impunemente, muestran su racismo y su chovinismo exaltando lo que denominan “los valores de Occidente” que, como estamos viendo, son el robo, la guerra y el crimen a pesar de que falseen la historia y pretendan mostrarnos su superioridad, que no es tal. Si a eso le unimos el anticomunismo que profesan y el odio profundo y la aversión que sienten con respecto de la clase obrera no nos equivocamos al denunciar la naturaleza fascista de las “democracias occidentales”, de EEUU, de la UE, del Estado español, en definitiva, de los imperialistas.

Pedro Sánchez se ha retratado durante todo este tiempo como un timorato, como una marioneta del imperialismo norteamericano al que hace un seguidismo enfermizo. Y no dudamos que se va a convertir en el primer verdugo de los obreros del Estado español en cuanto desde el BCE y desde la UE le impongan medidas criminales contra el pueblo en un breve espacio de tiempo. Pedro Sánchez es un mayordomo del imperialismo que ha profundizado en la política exterior rastrera y criminal que caracteriza al Estado español. Y a este personaje lo está sustentando en el Gobierno el PCE-IU y PODEMOS que son exactamente lo mismo que Sánchez y el PSOE. Si tuvieran un mínimo de decoro se saldrían del Gobierno pero para estos oportunistas de PCE-IU y PODEMOS – que como parte del Gobierno y por no romper con este suceso tienen también las manos manchadas de la sangre derramada en la valla de Melilla y de la sangre derramada en el Donbass y en Ucrania – lo más importante es seguir manteniendo su poltrona y sus prebendas. Sin duda, el oportunismo y la socialdemocracia son la pata izquierda del fascismo, al que le allanan el terreno, como ha acontecido a lo largo de la historia y como lo acredita el Gobierno de “progreso” del títere Pedro Sánchez.

La clase obrera es internacional. Los que han muerto en la valla de Melilla forman la misma clase obrera que la que es explotada en territorio español, que está sufriendo la guerra en Ucrania o que sufre los bloqueos en Cuba o en Corea, o es reprimida en el Sáhara Occidental o Palestina. Porque solo hay una clase obrera. Por ello, la clase obrera ahora más que nunca debe abrazar el internacionalismo proletario y debe luchar contra la barbarie capitalista, contra el fascismo y sus guerras de carroña y sobre todo debe unirse y organizarse para confrontarse al capitalismo, por liquidar el capitalismo responsable del sufrimiento, la pobreza y la muerte de la clase obrera, del género humano. Y para acabar con todo ello hay que acabar con la raíz que lo genera, hay que acabar con el capitalismo, con la burguesía y construir el socialismo. Pero ello no será posible mientras los comunistas no nos unamos con ese objetivo, con el objetivo de la Revolución, de derrocar al capitalismo con el marxismo-leninismo como arma y con la clase obrera como sujeto revolucionario y sujeto transformador de la sociedad y constructor del nuevo mundo libre de explotación capitalista, que haga que el ser humano abandone la prehistoria en la que hoy vive y empiece a escribir conscientemente la historia de una humanidad libre de explotación y de guerras.

 

¡MUERTE AL FASCISMO Y AL CAPITALISMO QUE LO ENGENDRA!

¡VIVA EL INTERNACIONALISMO PROLETARIO, POR UNA INTERNACIONAL COMUNISTA!

¡SOCIALISMO O BARBARIE!

 

Madrid, 27 de junio de 2022

COMITÉ EJECUTIVO DEL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E.)

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