Que el estado es un instrumento de represión de una clase social sobre otra, ya nos lo advirtió Lenin en “El estado y la revolución” (1917). Esta fórmula, que puede parecer sencilla, lleva implícita la conclusión obvia de que ninguna clase social puede vivir liberada de explotación bajo el gobierno de otra clase social distinta a ella misma.

Tan importante como tener claro esto, es necesario el combatir a muerte el oportunismo (que su pata teórica es el revisionismo y práctica el reformismo), para acabar la política de conciliación y colaboracionismo con los gobiernos capitalistas, como es el caso del Gobierno PSOE-Sumar-IU-PCE que implica la subordinación de la clase obrera a la burguesía y la perpetuación de la explotación del proletariado. El oportunismo es ideología burguesa que corrompe ideológicamente las filas del proletariado.

El gobierno de “progreso”, Venezuela, RASD, Palestina y Ucrania.

Con respecto de Venezuela estamos pudiendo comprobar como los fascistas de diferente pelaje, desde PP al PNV pasando por VOX, abiertamente defienden el golpe de estado en dicho país caribeño, escupiendo sin miramientos a los derechos democráticos elementales como son la soberanía nacional y la independencia.

Sin embargo, el gobierno “progresista” de PSOE-IU-PCE-SUMAR, que ya tiene la experiencia de violar los más elementales principios democráticos reconociendo al fascista Juan Guaidó como presidente años atrás, defiende con la misma intensidad a la oposición fascista y golpista venezolana títere de EEUU que los primeros, pero empleando otras formas.

El Gobierno de PSOE-Sumar-IU-PCE, cuyo presidente hace un mes defendía en Senegal la expulsión de inmigrantes irregulares, no duda en otorgar asilo a todo dirigente fascista y prófugos de la justicia venezolana, al igual que dotarlos de todo tipo de ayuda en su organización. Por un lado vota en contra de la PNL contra Venezuela y por la imposición de un presidente para ese país por parte del Congreso de los Diputados, mientras que por el otro tiene a miembros del CNI trabajando en una operación golpista en Venezuela dirigida por la CIA. Eso es lo está haciendo el gobierno de PSOE-PCE-IU-Sumar.

Por un lado reconocen el Estado de Palestina y, por el otro, venden armas al estado fascista israelí para que masacren a los palestinos. Por un lado dicen defender al pueblo saharaui y por el otro los venden a la corrupta monarquía alauí.  Y, cómo no, de manera abierta defienden al estado fascista de Ucrania, que ha ilegalizado al Partido Comunista y al partido socialista y que asesina a sindicalistas, no dudando en dar dineros y armas a los fascistas ucranianos.

La acción de gobierno de la “izquierda” de Sumar-IU-PCE es abrazar a la organización criminal OTAN, aumentando el presupuesto del 1.26% del PIB al 2% bajo su gobierno. Mientras hay dinero público para fascistas, para la guerra y para todo tipo de mercenario, en Madrid hay 40.000 niños que sólo pueden comer la comida del colegio, más de 12 millones de ciudadanos españoles viven en situación de riesgo de pobreza y exclusión social. Por otro lado, el gobierno de “progreso” mantiene y consolida las políticas del gobierno reaccionario y corrupto de Rajoy, por ejemplo la Ley Mordaza, la Reforma Laboral, la progresiva privatización de los servicios públicos, el medicamentazo, etcétera.

La socialdemocracia, el oportunismo es la formulación que tienen los imperialistas para engañar al proletariado y alejarlo de la vía revolucionaria, conduciéndolos por el redil imperialista al objeto de consolidar y profundizar las políticas reaccionarias y preparar el ascenso al poder, nuevamente, a los fascistas para que sigan arrasando contra los trabajadores. Ambos, fascistas y oportunistas, son dos caras de la misma moneda, de la dominación burguesa, de su dictadura.

La clase obrera solamente tiene la vía revolucionaria, el camino de la revolución socialista para emanciparse, para acabar con el periodo de barbarie que imponen los monopolios. El fascismo hoy es lo único que puede ofrecer el capitalismo moribundo y terminal.

El imperialismo nos lleva irremisiblemente a la barbarie, a la guerra imperialista, a una nueva Guerra Mundial. Únicamente la clase obrera organizada, dirigida por la vanguardia comunista organizada en el Partido, puede acabar con el fascismo, con la agonía criminal del capitalismo monopolista dispuesto a llevarse a centenares de millones de vidas obreras por delante. Una barbarie que vemos cotidianamente en el exterminio contra el pueblo palestino, en los bloqueos criminales contra países como Cuba o Corea del Norte que son auténticos actos de genocidio.

¡PROLETARIOS DEL MUNDO, UNÍOS!

¡POR LA REVOLUCIÓN PROLETARIA MUNDIAL!

¡POR EL SOCIALISMO, POR LA DICTADURA DEL PROLETARIADO!

COMISIÓN DE AGITACIÓN Y PROPAGANDA DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E.)