¡Muerte al Estado genocida de Israel, viva la lucha del pueblo palestino!
Ayer, 12 de mayo, Palestina amanecía entre bombardeos dirigidos contra edificios en Gaza por parte de las fuerzas de ocupación israelí. La ocupación militar del territorio palestino, la colonización y el apartheid a su población se acelera a cada día que pasa.
Durante el mes de abril, coincidiendo con el comienzo del Ramadán, se dieron lugar una serie de marchas que promovían la quema de los árabes y su sometimiento absoluto a un Estado teocrático judío. Durante los disturbios generados, más de 100 palestinos fueron heridos. Esto se enmarca en un contexto ya de por sí cruento, en el que, además, ha hecho su aparición la organización fascista Lehava, que pide la completa segregación entre árabes e israelíes, se opone a los matrimonios interreligiosos y promueve la creación de un Estado donde los no-judíos no tengan derecho al voto. Además, la escalada bélica entre Hamas e Israel parece abocar a la guerra total, siendo el proletariado palestino e israelí quienes paguen con sus vidas esta rivalidad territorial y religiosa.
Este contexto está siendo aprovechado, por supuesto, por el Estado terrorista de Israel para continuar con el exterminio planeado de población palestina y la ocupación de tierras, negocios y hogares. Así, en este contexto de guerra civil, la policía israelí ataca sin reparo alguno al pueblo palestino, lanzando granadas aturdidoras y disparando pelotas de goma.
En paralelo, existe también una batalla legal en la que asociaciones fascistas judías buscan desalojar legalmente a palestinos de sus hogares, argumentando que las casas palestinas fueron construidas en tierras de su propiedad antes del establecimiento del Estado de Israel. Esto provocó las manifestaciones y enfrentamientos entre palestinos y las fuerzas israelíes que se dieron el 3 de mayo en el barrio de Sheij Jarrah, en Jerusalén Este, durante una manifestación en apoyo a familias palestinas amenazadas de la expulsión de sus viviendas, en beneficio, por supuesto, de los colonos judíos, respaldados judicialmente por el tribunal de Distrito de Jerusalén, que buscan aglutinar bajo las garras del sionismo todos los recursos del país, con un absoluto desprecio por la vida humana de los palestinos.
Como vemos, Israel continúa con su política de extensión imperialista en los territorios palestinos ocupados, provocando una expulsión forzosa de ciudadanos palestinos, con miles de asesinatos, heridos y detenciones completamente impunes. El momento más trágico del terrorismo reciente del Estado de Israel se produjo el pasado día 10 de mayo, donde los ataques de las fuerzas de ocupación israelíes contra la Franja de Gaza dejaron más de 850 palestinos heridos y 26 personas muertas, entre ellas nueve niños.
El pueblo de Palestina sufre un proceso de ocupación militar desde hace más de siete décadas, colonización, ataques continuados a vehículos, viviendas, hospitales y escuelas palestinas y un expolio sanitario, negando la entrada de vacunas y otros materiales médicos a los Territorios Palestinos Ocupados para paliar la catástrofe sanitaria de la COVID-19.
El pueblo palestino, castigado, bloqueado y continuamente masacrado necesita la solidaridad del mundo. Y no nos referimos a la falsa solidaridad que muestra la Comunidad Internacional, pues de poco o nada sirven las llamadas al “cese de la violencia” que realizan Estados imperialistas como España, Francia o Estados Unidos, mientras que, bajo manga, Estados Unidos abona ayudas multimillonarias para el desarrollo militar de Israel y le otorga respaldo absoluto ante todos los organismos internacionales.
Solo la solidaridad entre los pueblos, la alianza internacionalista y antiimperialista, y el avance progresivo del Socialismo podrán poner fin a la barbarie del imperialismo. Hoy, la revolución socialista se ha convertido en una cuestión de supervivencia para la gran mayoría de la población mundial.
¡Viva el internacionalismo proletario!
¡Viva la lucha del pueblo palestino!
Madrid, 13 de mayo de 2021
SECRETARÍA DE RELACIONES INTERNACIONALES DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E.)