La socialdemocracia en francia congela pensiones, subsidios y salarios a los funcionarios

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 El flamante primer ministro francés Manuel Valls, hijo de emigrantes españoles, aplica la única política posible que le dictan los capitalistas franceses para “salir” de la crisis: reducir el gasto público para ahorrar 50 mil millones de euros1. Congelar pensiones, salarios de funcionarios, y reducir ayudas y subsidios a las clases populares.

Nada nuevo bajo el sol capitalista, que sin embargo no toca las ayudas y desgravaciones que desde siempre ha dado al Estado a los empresarios. De hecho, ese recorte de gasto social, que no es más que un salario indirecto pagado con nuestros propios impuestos, servirá para financiar el “pacto de responsabilidad” con el que los empresarios dejarán de pagar las cotizaciones a los subsidios familiares.

¿Cuál es el argumento para justificar este recorte? “No podemos vivir por encima de nuestras posibilidades2 afirma Valls, en nombre de sus jefes de la patronal francesa Medef, lo cual nos recuerda a lo que decía la patronal española en boca de su dirigente Rosell. “hemos comido más de tres platos al día, hay que pagar los excesos3

Veamos quiénes viven por encima de nuestras posibilidades. Una vez que el Estado capitalista se desangra ayudando a la banca y las empresas para volver a llenar sus arcas y seguir sosteniendo al capital, recorta la parte que le devuelve a la clase trabajadora de todo lo que produce ésta. La clase trabajadora genera todo el capital que se apropian los dueños de las empresas y encima tiene que pagar impuestos para mantener ese Estado cuya función es defender los intereses del Capital. Círculo perfecto.

El Estado da innumerables ayudas y subvenciones a las empresas para disminuir el “riesgo” de sus inversiones. En Francia como en todos los países capitalistas hay numerosos organismos públicos que ayudan a las empresas. Varios ejemplos:

– “Fondos de desarrollo económico y social”, desde 1955 concede préstamos a las empresas a intereses inferiores a los del mercado. Últimamente ha sido renovado con 300 millones de euros4.

 Inauguración de la Banca Pública de Inversión por el ministro de economía en 2012

 – En 2013 Banca Pública de Inversión ha ayudado a la industria con 3,7 mil millones de euros en forma de financiación de préstamos, garantía de créditos y ayudas a la innovación. De aquí a finales de 2014 invertirá 170 millones para socorrer pequeñas y medianas empresas5.

– El Comité Interministerial de Restructuración Ïndustrial ayuda a las empresas de más de 400 empleados en dificultad.

– El Ministerio de Asuntos Exteriores creó en marzo de 2013 la Dirección de Empresas para apoyar su desarrollo internacional.

– Desde 2012 cada región cuenta con un “Comisario de recuperación productiva”, encargado de respaldar a las empresas en dificultad.

– Las Direcciones Regionales de Empresas, Competencia, Consumo, Trabajo y Empleo asesoran y apoyan a las empresas.

– El programa “Inversiones de futuro” financia con 35 mil millones de euros la “innovación en Francia, reforzar la productividad, la capacidad de innovar y aumentar la competitividad de las empresas”.

– Las innumerables ayudas a la exportación abarcan gastos de adaptación de productos a los mercados extranjeros, costes de adaptación a las normas, gastos de diseño, de prospección, participación en ferias y salones, contratación y formación del personal comercial, gastos asociados a los Voluntarios Internacionales en Empresa, gastos de comunicación, gastos de sondeo, etc.6.

Los industriales agroalimentarios también han recibido su tajada

– Como ejemplos de estas ayudas, tenemos los 55 millones de euros dados a los exportadores de pollos congelados franceses Tilly-Sabco y Doux en 2012, más 15 millones de euros más en 20137.

– Y por supuesto no podía faltar la banca. Entre 2008 y 2010 el Estado francés concedió 360 mil millones de euros a los primeros grupos bancarios franceses: BNP Paribas, Société Générale, BCPE,…

La propaganda mediática del capital intenta engrandecer las “ayudas” que reciben los trabajadores que al lado de estas otras cifras se quedan en lo que son: migajas que complementan los salarios de miseria y permiten crear la ilusión de un “Estado de bienestar” al servicio de toda la sociedad; idea fomentada por la socialdemocracia y sus aliados de la “izquierda transformadora” que mantienen una gran influencia ideológica sobre ciertas capas de la clase asalariada, como los funcionarios y trabajadores altamente cualificados, hasta el punto de convencerles de que efectivamente los trabajadores vivimos por encima de nuestras posibilidades o incluso de que luchen para que le sigan dando ayudas a sus patrones.

Los marxistas-leninistas tenemos por misión quitar la careta de este Estado al servicio de un régimen insostenible y organizar a la clase obrera para que levante su propio Estado y su propia democracia a partir de los centros de trabajo, centros de formación y estudio, barrios, pueblos, cortijos, a través del Frente Único del Pueblo. En manos de la clase obrera  -la clase social más moderna y organizada de la historia-  está acabar de una vez por todas con la sociedad de clases y de explotación del hombre por el hombre, más allá de falsas ilusiones de reformas y supuestos pasos intermedios que ya se han demostrado abocados al fracaso.

POR EL FIN DE LA EXPLOTACIÓN DEL HOMBRE POR EL HOMBRE

POR EL FRENTE ÚNICO DEL PUEBLO

POR EL SOCIALISMO

Comisión de Relaciones Internacionales del PCOE


 

1Valls anuncia recortes a funcionarios, pensionistas y prestaciones“, La Información, 16 de abril de 2014

2 Valls : “nous ne pouvons plus vivre au-dessus de nos moyens“, TF1, 16 de abril de 2014

5Bpifrance crea un nuevo fondo de inversión para las PYME“, La Libre, 8 de abril de 2013.

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