El socialchovinismo del Partido Comunista de la Federación Rusa (PCFR)
El Partido Comunista de la Federación Rusa (PCFR), así como su Secretario General, Gennadi Andréyevich Ziugánov, representan una de las lacras a extirpar en el Movimiento Comunista Internacional: el socialchovinismo ruso como falso aliado frente al imperialismo estadounidense-europeo.
Con relación a los últimos acontecimiento en Kazajistán, estos oportunistas no han dudado en compartir su particular visión de los hechos al objeto, nuevamente, de desviar a los trabajadores del camino del marxismo-leninismo y de la revolución proletaria mundial en favor del oportunismo que niega que la guerra imperialista es la prolongación de la política de las grandes potencias por otros medios, por la violencia y la barbarie, de saqueo, opresión de otras naciones y aplastamiento del movimiento obrero.
Rápidamente, en su documento aluden a que la situación en Kazajistán «es consecuencia directa de la tragedia que se produjera con todos nosotros hace 35 años». Esto ya nos aporta muchas pistas acerca de la visión absurdamente prosoviética de esta organización, la cual carece de una postura crítica con respecto a lo sucedido en el seno del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS) tras el asesinato del camarada Stalin, en 1953, y el XX Congreso del PCUS, en 1956, hechos que supusieron la punta de lanza de la descentralización económica que llevaba consigo la liquidación de la economía planificada, que abrieron las puertas de par en par a la corrupción y donde se produjo la penetración de la ideología burguesa en el seno del Partido. Así, la Unión Soviética que cayó el 25 de diciembre de 1991 tenía más semblanza con un Estado imperialista que con un Estado socialista, como había sido antaño. Mijaíl Gorbachov no fue quien acabó con el socialismo, ya que sus acciones fueron el resultado lógico de la coronación de un proceso de restablecimiento capitalista que venía sucediendo durante casi cuatro décadas. El periodo de reversión del socialismo impulsado por agentes de la burguesía demostró que el camarada Stalin tenía razón cuando advertía, en contra de la opinión de oportunistas como Trotski, que el desarrollo del socialismo en un país puede verse revertido y reestablecerse nuevamente el capitalismo; así ocurrió en la Unión Soviética.
Siguiendo con el texto, llama poderosamente la atención que «según las estimaciones del PCFR, el envío de las fuerzas de paz es una medida obligatoria, pero adecuada y oportuna llamada a sofocar la llama del nuevo “golpe del Estado de color”». Es decir, estos pretendidos comunistas, abrazando el chovinismo y la reacción, están defendiendo abiertamente que las fuerzas militares de los oligarcas rusos se desplieguen en Kazajistán. Ante un conflicto imperialista, estos socialchovinistas se posicionan con su burguesía nacional, algo que ya fue denunciado con dureza por parte del camarada Lenin en el contexto de la I Guerra Mundial:
«Hoy ya no cabe duda de que la guerra es imperialista por ambas partes. Sólo los capitalistas y sus secuaces, los socialpatriotas y los socialchovinistas […] pueden negar o velar este hecho. Tanto la burguesía alemana como la burguesía anglo-francesa hacen la guerra para saquear otros países, para estrangular a los pequeños pueblos, para establecer su dominación financiera en el mundo, para proceder al reparto y redistribución de las colonias, para salvar, engañando y dividiendo a los obreros de los distintos países, el agonizante régimen capitalista»[i].
«Los socialchovinistas repiten el engaño burgués de que la guerra se hace en defensa de la libertad y de la existencia de las naciones, con lo cual se ponen del lado de la burguesía contra el proletariado. […] El Socialchovinismo, que defiende de hecho los privilegios, las ventajas, el saqueo y la violencia de “su” burguesía imperialista (o de toda burguesía en general), constituye una traición absoluta a todas las ideas socialistas»[ii].
El PCFR, al justificar la participación de Rusia en esta guerra, véase como ejemplo, además de lo ya citado, cuando dicen que «estamos seguros que la misión pacífica de la Organización del Tratado de Defensa Colectiva va a contribuir a la estabilización de la situación en la región de Asia Central» contribuye a perpetuar la opresión imperialista sobre las naciones y pueblos del mundo, demostrando que en la práctica no les importa el destino de los trabajadores kazajos. Su falsedad, su hipocresía y desvirtuación del marxismo-leninismo debe ser considerada como una traición a la causa del proletariado mundial.
Los socialchovinistas del PCFR dicen que defienden los intereses de los trabajadores rusos y kazajos, pero se equivocan profundamente, puesto que sus políticas solo defienden los intereses de un puñado de oligarcas rusos en pugna contra el imperialismo occidental. Los marxistas-leninistas, contrario a esto, defendemos la revolución proletaria como la única salida que tiene el proletariado en tiempos de guerra. La consigna de los comunistas es clara: ¡Transformar la guerra imperialista en guerra civil, en la guerra de los oprimidos contra los opresores por el socialismo!
Desde el Partido Comunista Obrero Español denunciamos la injerencia de todo imperialismo en el destino del pueblo de Kazajistán y animamos al proletariado del país a que siga adelante en la lucha de clases, redoblando esfuerzos por organizarse y transmitir la conciencia comunista a las amplias masas que han demostrado su fuerza con la huelga de los obreros de la región de Mangistau.
¡VIVA EL INTERNACIONALISMO PROLETARIO!
¡POR LA CAÍDA DEL CAPITALISMO EN KAZAJISTÁN!
¡EL PUEBLO KAZAJO NO CEDE ANTE NINGÚN IMPERIALISMO!
Madrid, 17 de enero de 2020
SECRETARÍA DE RELACIONES INTERNACIONELES DEL COMITÉ CENTRAL DEL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E)
[i] Vladimir I. Lenin. Cartas desde Lejos. En Obras escogidas, Tomo VI (1916-1917), p. 84.
[ii] Vladimir I. Lenin (1915). El socialismo y la guerra (La actitud del P.O.S.D.R. ante la guerra).