EN DEFENSA DEL PUEBLO CATALÁN, CONTRA EL ESTADO FASCISTA
Cada día que pasa comprobamos que la corrupción del Estado es infinita. Se suceden los casos de corrupción con una velocidad pasmosa, de tal modo que el escándalo acaecido ayer envejece aceleradamente al día siguiente al sucederse otro que lo supera. Y ello es porque el Estado está carcomido por la corrupción; es la corrupción institucionalizada.
Esta situación no sólo se da en el ámbito político -Poder Ejecutivo- sino en todas las expresiones y en todas las administraciones del Estado. El Estado es corrupto porque el sistema económico que lo refleja es la corrupción, es el robo descarado.
Las interlocutorias del Magistrado del Tribunal Supremo, por los que se persigue, reprime ideológicamente a dirigentes independentistas, se les encarcela y se les empuja al exilio reflejan la corrupción del Estado y su descomposición. Por ello el Estado recurre a la única tabla de salvación que tiene: el fascismo.
Las diferentes reformas producidas por el Gobierno de Rajoy –ley de seguridad privada, ley mordaza, reforma del Código Penal, reforma del Tribunal Constitucional, etcétera- se están mostrando en la práctica en Cataluña, retratando al Estado español como lo que es, un Estado fascista donde, como no puede ser de otra forma, se persiguen los derechos democráticos de los pueblos, donde se ilegalizan de facto las ideologías y donde proliferan los presos políticos; cuyo cuadro se cierra contemplando quiénes están a la cabeza de la represión contra Cataluña. En primer lugar, un Ministro del Interior que cuando fue Alcalde de Sevilla no dudó en otorgar generosas subvenciones a organizaciones fascistas, apoyado por el Coronel de la Guardia Civil Pérez de los Cobos con pasado y militancia fascista en la Fuerza Nueva de Blas Piñar ejerciendo el papel de acusación popular la organización fascista VOX. Estos son los pilares del juez Llarena.
La conculcación de las leyes por parte del gobierno, del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo así como la represión política y policial ejercida por el Estado no hacen más que recrudecer un conflicto que, al haberse internacionalizado debido a la implicación de Bélgica, Escocia, Suiza y Alemania junto con la ONU -cuyo Comité de Derechos Humanos ya ha reconocido la vulneración de los derechos fundamentales de Jordi Sánchez- ha debilitado la imagen del Estado español e indudablemente provocará un desgaste notable del proyecto imperialista de los monopolios europeos, es decir, de la Unión Europea.
A nivel interno, la aplicación del artículo 155 ha hecho que una parte importante del pueblo catalán haya pasado de pensar que a través de la democracia conquistaría la independencia a la necesidad de conquistar la independencia para tener democracia; es por ello que se están dotando de elementos organizativos cada vez más alejados de la institucionalidad burguesa como son los Comités de Defensa de la República (CDR), estructuras populares que suponen un salto cualitativo en términos de lucha contra el Estado. Nuestro partido hermano, el PCOC, debe seguir estando presente en la lucha del pueblo a través de los CDR para llevar con nuestras fuerzas la política del Partido con los que dotarlos de nuestra ideología y de los principios clasistas y mostrar que la mayoría del pueblo catalán, su clase obrera y los pequeños campesinos, únicamente conseguirán la democracia y su emancipación nacional luchando y conquistando el socialismo.
El Partido Comunista Obrero Español está con la clase obrera catalana, con el pueblo catalán que está exhibiendo una dignidad y una integridad sobresalientes en la lucha por sus legítimos derechos democráticos contra un Estado fascista como el español. La clase obrera del Estado español, cuya depauperación crece al igual que se acrecienta la represión del Estado, debe expresar su solidaridad y convertirse en el aliado del pueblo catalán en la lucha que éste libra contra este Estado tiránico que nos oprime y nos niega el desarrollo y la vida a todos los obreros. En esta dirección, en la del combate contra el capitalismo monopolista de Estado español, contra la Unión Europea y por el socialismo, nuestro Partido hace un llamamiento a los trabajadores del Estado a cerrar filas con la clase obrera catalana y a la movilización contra el Estado fascista español que impide nuestros derechos políticos, y emplearemos nuestras fuerzas para contribuir a la movilización de los trabajadores de nuestro país para cerrarle el paso al fascismo.
¡LIBERTAD DE TODOS LOS PRESOS POLÍTICOS!
¡ABAJO EL ESTADO IMPERIALISTA ESPAÑOL!
¡POR EL SOCIALISMO!
Madrid, 27 de marzo de 2018.
COMITÉ EJECUTIVO DEL PARTIDO COMUNISTA OBRERO ESPAÑOL (P.C.O.E.)