Continúan los desahucios a pesar de los gobiernos del ‘cambio’
Madrid y Barcelona concentran el grueso de los pisos en alquiler en España, con casi un millón de viviendas arrendadas. Ante la imposibilidad de muchas familias obreras de acceder a la compra de una vivienda, el capitalismo ha encontrado una salida para mantener su margen de beneficios a costa del bienestar y la estabilidad de miles de familias, el mercado de alquiler de viviendas. Esto sumado al negocio de plataformas como AirBnb, con un tercio de las viviendas concentradas en manos de empresas y grandes propietarios, hacen cada día más complicado encontrar un alquiler asequible en ciudades como Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Bilbao, etc.
El número de hipotecas concedidas por los bancos en los últimos años ha decrecido debido a la enorme precariedad que sufrimos los trabajadores, por lo que el mercado del alquiler ha aumentado considerablemente. Esto hace que el porcentaje de desahucios haya virado igualmente desde los hipotecarios a los desahucios por impago del alquiler. Los desahuciados somos los mismos, familias trabajadoras, solo que ahora muchos más vivimos de alquiler.
Durante 2017 se produjeron, según datos del Consejo General del Poder Judicial, casi 100 desahucios al día por impago del alquiler (35.666 en todo el año), por unos 60 desahucios al día por no pagar la hipoteca (22.330 en el año). Con respecto a los desahucios por impago del alquiler, 8.624 se produjeron en Cataluña y 5.001 en la Comunidad de Madrid. En concreto, en la ciudad de Barcelona, en 2017 se produjeron 2.591 desahucios, de los cuales el 85% fueron por impagos del alquiler. En Madrid vemos como en una semana se acumulan los desahucios en un barrio obrero como Carabanchel, superando las posibilidades de intentar pararlos de plataformas como Stop Desahucios. En Madrid, la PAH acusa a Manuela Carmena y a Ahora Madrid, quienes solo han ejecutado un 3% de las viviendas sociales prometidas, de complicidad con los bancos al hacerles el trabajo sucio.
Y todo esto ocurre a pesar de los gobiernos del cambio, a pesar de las campañas de Ahora Madrid con bonitos lemas como “la vivienda es un derecho, no un negocio”, completamente vacíos de significado en un sistema capitalista. A pesar de que Ada Colau, quien solo ha construido el 4,5% de las viviendas sociales prometidas, provenga de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, su particular lanzadera política.
El oportunismo político sigue engañando al pueblo trabajador con falsas promesas de un mundo mejor, ocultando que bajo un sistema capitalista, los trabajadores seremos cada vez más pobres y viviremos cada vez peor, intentando desmovilizar las luchas que se dan en las calles y reconducir el descontento hacia el voto y la representación parlamentaria.
En este sistema la vivienda es y será un negocio, en manos de grandes empresas y bancos, los mismos que después son rescatados con dinero público. Si los trabajadores queremos tener un futuro estable sin desahucios y con viviendas dignas, solo nos queda acabar con el capitalismo y construir el Socialismo, para, mediante una economía planificada y orientada al bienestar social en lugar del beneficio privado de las empresas, garantizar la vivienda así como todos los servicios básicos, educación, sanidad y pensiones a todos los trabajadores. Para ello hemos de huir del oportunismo político que nos vende la idea de que votar a unos u otros supondrá una diferencia, y construir nuestra propia democracia popular a través de un Frente Único del Pueblo que integre todas las luchas.
¡POR EL FRENTE ÚNICO DEL PUEBLO!
¡POR EL SOCIALISMO!
¡ORGANÍZATE EN EL PCOE!
Secretaría de Agitación y Propaganda del Partido Comunista Obrero Español (PCOE)