Asesinados tres trabajadores andaluces en el tajo. Y no se habla de violencia

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Los empresarios vuelven a ser responsables de la muerte de 3 trabajadores en Andalucía nada más empezar 2019.

Un obrero de la construcción, autónomo, cayó desde un sexto piso mientras trabajaba para una subcontrata de una obra del grupo Insur en Sevilla. La línea de vida a la que se anclaba no reunía las condiciones necesarias para impedir el trágico desenlace.

La promoción de viviendas en la que trabajaba el obrero asesinado por la patronal se sitúa en una zona donde el m² es el “más goloso de Sevilla”, según palabras del grupo Insur en su web. Los precios de las futuras viviendas llegan hasta el medio millón de euros. De nuevo, la clase obrera muere produciendo un bien de lujo que sólo podrán disfrutar sus explotadores.

Casualmente el pasado diciembre, la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) condecoró al grupo Insur con el Premio ‘CEA de Responsabilidad Social Empresarial‘.

Otro obrero de la construcción cayó también al vacío desde una plataforma a unos 20 metros de altura en Cádiz. Laboraba para otra subcontrata también, Seteca, contratada por Ferrovial Agromán, en una promoción de viviendas que fue bendecida en 2016 por el actual alcalde podemita de Cádiz, Jose María González, con las siguientes palabras: «Aunque se trata de una construcción privada, es una buena señal y un síntoma más de la recuperación de la ciudad». La recuperación, en todo caso, será como siempre para sus amigos de la patronal de la construcción.

También contamos con la muerte de un joven de 25 años que ha sido asesinado por la patronal al caer de su moto mientras repartía pizzas en Arcos de la Frontera. Ni qué decir tiene que la presión y precariedad que sufren estos repartidores los pone en riesgo constante de graves accidentes.

La economía de mercado impone la esclavitud a los trabajadores. Fruto de la competencia por conquistar el mercado están obligados a reducir los costes para poder bajar los precios SIN REBAJAR SUS BENEFICIOS, por mucho que hagan el “paripé” toda el hampa de oportunistas desde IU-PCE-PODEMOS hasta CCOO-UGT. Porque señores oportunistas, el último fin de la economía de mercado, del capitalismo, les guste o no, es el ÁNIMO DE LUCRO. Suplicando como hacen constantemente a los verdugos que dejen de matarnos, se convierten en sus mejores cómplices.

Para el capital, nacional o extranjero, los obreros no somos más que mercancías fácilmente reemplazables, pues ellos provocan un desempleo que les permite imponer cualquier condición de trabajo, pagar cualquier salario, saltarse las medidas de seguridad… Y los obreros no se atreven a denunciar por miedo a perder el trabajo.

Ese miedo que sufre la clase obrera, es terror por no poder dar de comer a los hijos, por no poder pagar la hipoteca, por no poder pagar las facturas, por no llegar a fin de mes. Ese terror que sufre la clase obrera supera incluso a la necesidad de protegerse ante el riesgo de morir en el tajo. Ese es el terrorismo de la patronal, tan blanqueado por sus sindicatos lacayos (CCOO y UGT), y por la socialdemocracia de antes (PSOE) y de ahora (IU-PCE-Podemos).

Esa aristocracia obrera corrompida por el capital, que vive en chalets de 540.000 euros como los líderes supremos de Podemos,  no podrán ni querrán entender jamás en qué condiciones sobrevive hoy la clase obrera.

Frente a la dictadura de la patronal sólo cabe que los trabajadores impongamos la nuestra: la Dictadura Democrática del Proletariado. Lo que significa que las empresas, fábricas, tierras, minas, y recursos naturales pasen a estar bajo control obrero para disfrutar de las riquezas que producimos y para vivir y trabajar en las condiciones que nosotros decidamos. Lo que significa acabar con el yugo de la explotación del hombre/mujer por el hombre/mujer.

 

Basta de asesinar a obreros

Contra la dictadura del capitalismo

Construyamos el Frente Único del Pueblo

 

Comité Provincial del Partido Comunista Obrero Español en Sevilla

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