Los trabajadores griegos se movilizan
“Estos sacrificios nos darán el espacio para respirar y el tiempo necesario para realizar grandes cambios”, dijo el premier ante sus ministros, en una reunión televisada en vivo, en la cual se comprometió a ejecutar un estricto plan de austeridad.
Estas medidas de choque fueron rechazadas desde el inicio de la crisis por sectores obreros y pensionados mediante huelgas y manifestaciones, en las que exigieron responsabilidad a banqueros y otros actores de la élite económica griega, a los cuales demandaron el financiamiento de los ajustes.
La “austeridad” está referida a recortes de empleo en el sector público, rebajas de salarios y pensiones, alzas de impuestos, reducción del déficit presupuestario, eliminación de bonos para trabajadores públicos, entre otras medidas.
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, aseguró que el plan de ajuste y reformas estructurales aceptadas por Grecia para equilibrar sus cuentas y evitar la quiebra, es “sólido y creíble”.
Barroso recomendó, como contrapartida, que los países de la eurozona y el FMI activen las ayudas prometidas para refinanciar la deuda griega, que pudiera ascender hasta 120 mil millones de euros.
El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel, reafirmaron su determinación de actuar rápidamente para implementar el plan de apoyo y acordaron fortalecer la estabilidad de la eurozona, según una nota oficial difundida por el gobierno francés.
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